Los actos de indisciplina escolar han sido siempre un fuerte dolor de cabeza para los directores de los colegios y su respectivo plantel docente.
Las malas acciones que los estudiantes llevan a cabo, se deben a múltiples factores, entre los cuales podríamos citar: 1) la imitación (debido al permanente apego a los programas televisivos nada educativos; las películas de cine con contenido promiscuo, frívolo, indisciplinado y de bromas tontas basadas únicamente en lo grosero y asqueroso carentes del buen sentido del humor; la música donde reina el doble sentido; la moda de los estereotipos del más rebelde y bravucón de la clase como signo de popularidad; el incentivo al egocentrismo, la vanidad y la envidia, etc.); 2) los dramas familiares a los cuales se encuentran inmersos algunos estudiantes fuera del aula; y, 3) los problemas producto del bullying donde algunos estudiantes adquieren la calidad de víctimas y otros son los agresores con el fin de aparentar popularidad, lo cual conlleva a serias secuelas en el desarrollo de la personalidad tanto para el agresor como para la víctima; entre otros factores complementarios.