Ciro Añez Núñez*
El
metaverso o metauniverso (acrónimo de «meta» -más allá- y «universo») es
un concepto que denota la siguiente generación de internet, por eso también la
denominan como la “nueva internet” o “internet del espacio”, por
el cual, se pretende conectar el mundo tangible con el intangible. Todo ello,
gracias a la tecnología blockchain, que permite no solo interactuar
en este nuevo mundo, sino también ejecutar acciones y ser propietarios del
mismo.
En
este nuevo año, muchos hablarán de la Web3, algunos la considerarán como la
utopía de una web “descentralizada y para todos” mientras que otros dirán que
es y será el próximo paso inevitable de nuestras relaciones y vínculos online.
Adviértase que en este universo digital
ya existen varias galaxias compuesto por diversos espacios como The
Sabdbox, Decentraland, entre otros más. Es decir, se estará operando en un
espacio alternativo y sin fronteras.
Esta tercera versión de Internet
descentralizada conllevará a una nueva cripto-economía, a través de la
interacción de distintas herramientas, por ende, las transacciones se realizan
dentro de cada plataforma o en mercados secundarios, generalmente, a través de
sus criptomonedas nativas además de otras tendencias que contribuyen a este
nuevo ecosistema.
El usuario, creará un avatar y
comenzará a vivir su experiencia en el metaverso, ofreciéndole la plataforma la
oportunidad de consumo que ésta ofrece y lo que las otras tiendas y empresas
que se instalan en el metaverso también ofrecen al consumidor.
De allí que es posible identificar
plenamente a dos tipos de responsables, a saber: la plataforma tecnológica con
sus servicios/productos directos; y, las empresas “tercerizadas” que se
instalan para ofrecer sus productos/servicios.
En otras palabras, existirá el
paralelismo a un centro comercial y los locales que se encuentran dentro del
mismo y las plataformas tendrán un centro de atención las 24 horas del día y
durante toda la semana, dentro del mismo mundo digital con el propósito de
atender distintas denuncias y resolver dudas de los usuarios mediante una
atención personalizada.
Si tomamos en cuenta de que existen
relaciones humanas en el medio, esto conlleva a que el Derecho deba tener su
alcance dentro de la plataforma, pues dicho espacio será parte de la sociedad y
propenderá a obtener necesariamente una regulación.
De esta manera, el metaverso trae
consigo nuevos desafíos, como, por ejemplo, saber identificar detrás de los
avatares la identidad de las personas, máxime si tomamos en cuenta el alto
tráfico de transacciones y sumas de dinero que pueden llegar a moverse en estos
mercados.
Ante
este nuevo paradigma y dada nuestra actualización, es recomendable que exista
el debido asesoramiento pues se debe cumplir con los estándares de un “KYC –
Know your costumer” y contemplar información “AML” para evitar el lavado de dinero, financiamiento del Terrorismo además del
surgimiento de posibles estafas.
Entre
las muchas otras necesidades que deberá contemplar el usuario, citar, por
ejemplo, la importancia de revisar y analizar cuál será la ley aplicable en un
mundo digital, teniendo como primera opción los Términos & Condiciones que
ésta establezca, donde no solo contemplen la ley aplicable, sino además la
posibilidad de acudir a métodos alternativos de resolución de conflictos, la
sede arbitral y sus reglamentos.
Cabe
mencionar, que el espacio digital, ya cuenta con reconocimiento jurídico de
acuerdo a la Ley modelo “UNCITRAL Model
Law on Electronic Commerce”.
Asimismo,
se deberá tomar énfasis en la privacidad de los datos de geolocalización y la
manera de cómo se regularán las transacciones realizadas dentro de un universo
virtual determinado. De allí que es muy probable que no existirá
una regulación específica a cualquier nivel para el
metaverso, por consiguiente, resulta previsible que algunos gigantes
tecnológicos lucrarán y ganarán participación de mercado antes de que la legislación
específica los alcance.
En
la medida de que tanto el usuario como las empresas vayan sumergiéndose en este
nuevo mundo digital, ambas no deben dejar de estar bien informadas y asesoradas
para evitarse futuras complicaciones, pues como asesor legal empresarial que
apuesta por la innovación nuestra misión es brindar seguridad a los proveedores
y sus usuarios/consumidores, ofreciendo experiencias sanas y positivas que
protejan datos personales, eviten ciberdelitos, cuenten con contratos acordes a
este contexto, exista una debida aplicación del derecho laboral, la propiedad
intelectual y el respeto de los derechos fundamentales, entre otros.
*Asesor
Legal Empresarial y Abogado de Litigios.
Sitio
Web: http://ciroanez.com